Cualquiera de mis puntos seguidos.



(tres puntos seguidos) del suspiro del alma despierta entre tus vertebras.
Estoy deslizándome entre la sangre que habita por tus venas, a la espera de correr cada segundo más cerca del sentido de que estés vivo. Creo con certeza absoluta que mi mente te ha inventado; si no que sentido alguno tendría que caprichoso estés aquí, a la exacta altura de mi mirada, abriéndote descaradamente un hueco en la profundidades de mis amados versos. 

Has entendido la criptografía de mi caligrafía, y todavía quiero seguir inexplicablemente jugando a nuestro escondite. Reúnete conmigo en la última parada de esta linea de metro, justo antes de que cierre, puntos antes de la una de la madrugada; prometo que siempre hay millones de esas bellas estrellas mirándonos. 

Son surrealistas tus minutos, y mírame aquí, que no encuentro porqué iba a empezar a fingir. Estoy cansada de agotadores poemas románticos, prefiero los inútiles acordes infantiles que componen mi ser entero, y que nos encontremos casualmente en espacios reservados solo para cuando eramos pequeños.
Estoy acariciando lo que hay en tu memoria, saber que te he visto en tantos otros lugares y nunca supe que se trataba exactamente de ti. Me gusta la locura de no sentirme ordenada.
No cierres tu puerta al salir; todavía podemos permitirnos un ultimo rezo, seguidos de todos y cada uno los  segundos que la vida pueda y quiera ofrecernos, en estos escasos momentos siempre prefiero pensar que serán infinitos, que he empezado a caerle mejor.

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